LA EDUCACIÓN FÍSICA EN LOS PLANTEAMENTOS POLITICO-EDUCATIVOS DEL PRIMER FRANQUISMO. LA EDUCACIÓN FÍSICA ESCOLAR COMO INSTRUMENTO POLÍTICO. II

Manuel Vizuete Carrizosa

 

MANUEL VIZUETE CARRIZOSA

Maestro de Enseñanza Primaria – Licenciado en Educación Física – Licenciado en Geografía e Historia – Doctor en Historia Contemporánea. Catedrático de Universidad. Líneas de Investigación: Didáctica de la Educación Física. Producción Materiales Didácticos para la Educación Física Escolar. Historia y Filosofía del Deporte y de la Educación Física. Formación del Profesorado de Educación Física. Fundador de La European Union Physical Education Associations (EUPEA) Comité de Expertos del Consejo de Europa (EF, Deporte Escolar y Deporte para Jóvenes) Coordinador del Foro Hispanomexicano.

 

 

 

LA EDUCACIÓN FÍSICA EN LOS PLANTEAMENTOS POLITICO-EDUCATIVOS DEL PRIMER FRANQUISMO. LA EDUCACIÓN FÍSICA ESCOLAR COMO INSTRUMENTO POLÍTICO. II

La relativa modernidad de la educación física y del deporte en la sociedad española, el choque ideológico y cultural que suponen, por su enfrentamiento o contraposición con valores considerados fundamentales en nuestra cultura, así como el que estas actividades, por su propia naturaleza hayan aparecido y desaparecido por imperativo legal, ligadas a procesos directamente relacionados con la evolución política del país, hacen que tanto su consideración, como el desarrollo, la asimilación y el impacto que las actividades físico-deportivas tienen en la sociedad española del franquismo, sean un parámetro bastante fiable de cómo esta misma sociedad evoluciona, se desarrolla y se incorpora al mundo moderno, en la medida en que el desarrollo económico y la evolución política permiten distintas formas de entender la vida y las relaciones  interpersonales.

Si durante los períodos anteriores a la guerra civil existe una implantación lenta y gradual de la educación física y de las actividades deportivas en la sociedad española, es con el franquismo cuando se produce una política intencional concreta, en base a objetivos políticos y educativos en relación con la ideas del régimen, hecho, que repercute en la ubicación y en el tratamiento de la educación física en los centros de enseñanza, y en su propuesta como actividad extraescolar, planteamiento que tendrá una relevancia especial por la presencia de un profesorado atípico, en los primeros tiempos a medio camino, entre comisario político e instructor militar.

La instrumentación política de las actividades físicas y de los deportes, es un planteamiento que va desde la actividad física escolar a las organizaciones juveniles del régimen y, desde aquí, o desde ambos ámbitos en ocasiones, a las  actividades públicas de masas que justifican la política de juventud, la forma en que esta acción se instrumenta es de tal sutileza que llega a desdibujar los conceptos y los ámbitos escolar-extraescolar de la disciplina.

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La educación física, los deportes y las actividades de aire libre o en la naturaleza, son las piedras angulares de la política de juventud del franquismo, y el más importante medio de reclutamiento de las juventudes del régimen y, consecuentemente, uno de los contenidos esenciales de los procesos formativos de los dirigentes de esas juventudes.

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Desde esta perspectiva es desde donde abordamos el estudio, con la intención de clarificar cuales fueron las intenciones, los modos, las formas y las repercusiones que a la corta ,y también a la larga, produjo el empleo intencional de la educación física y del deporte, como medio agente de un componente llamado Formación del Espíritu Nacional, el cual estaba integrado por la educación física, la formación política y la formación premilitar, esta última solo al principio, como factores esenciales de una nueva idea  política para la educación de las nuevas generaciones, teniendo en cuenta, que esta forma de educación debía conseguir, el que estas mismas generaciones se convirtieran en la justificación y en los agentes de propaganda del propio régimen, mediante un cuidadoso proceso de selección, formación y promoción dentro del sistema.

Al referirnos, por tanto, a la educación física y al deporte escolar de este periodo, los consideraremos como una parte de la política de juventud, refiriéndonos, de forma obligada, a las instituciones Frente de Juventudes y Sección Femenina de F.E.T. y de las J.O.N.S.  a las que se encomendó llevar a cabo esta labor.

La participación de la mujer en las actividades de educación física y deportivas escolares estuvieron, en mayor medida que la de los varones, sujetas a planteamientos ideológicos y políticos, corriendo suerte pareja con la de su participación en  los demás ordenes de la vida, naturalmente se sujetó al patrón que para la mujer se había prefigurado en el planteamiento filosófico de la Falange[1]  de la mano de las teorías de Onésimo Redondo,[2]  y de las que esbozó el propio José Antonio Primo de Rivera al referirse a la función de la mujer, a la que se le destina el papel de madre y compañera del hombre casi en exclusiva, [3]así que la justificación de la educación física escolar en la mujer estará orientada y referida a estos fines.

P3285 sec. Femenina.

En general, los planteamientos políticos de la educación física y del deporte durante el franquismo, responden a los modelos de política para y política por la juventud que define Sáez Marín,[4] el concepto con es, normalmente, de difícil aplicación en la práctica deportiva, podemos asegurar que durante su vida activa los deportistas, también en la actualidad, sea cual fuere su nivel, son eternos menores de edad sobre los que la familia, los entrenadores y los sistemas organizativos del deporte, sean clubs, federaciones, o el propio Estado, toman las decisiones últimas, incluidas las que afectan a su vida privada. El concepto disciplina en su definición militar más pura de: obediencia al superior aun cuando la razón aconseje lo contrario es la más clara definición de la subordinación de los deportistas al sistema, esta carencia de libertad para la toma de decisiones, es la que, de hecho, invalida el concepto de política con los deportistas y la que posibilita su empleo con fines políticos, o extradeportivos.

En la práctica, los resultados de estas políticas referidas a la educación física y al deporte, comportaron una situación de dirigismo tutelado por las instituciones del régimen, sobre unas bases absolutamente pasivas, dóciles y conformistas, que  contribuyen en gran medida a garantizar la permanencia del sistema.

Desde una idea de actividad social en progresión, justificada en un primer momento por la finalidad educativa e higiénica, con el expreso deseo de hacerla llegar al común de la sociedad, el régimen franquista abandona la idea de plantear estas actividades de forma sistemática y organizada entre la población adulta a las que deja, casi a su libre albedrío, la posibilidad de organizarse e incluso les permite mantener entidades asociativas y clubs en medio de lo monolítico del régimen de partido único.

Abandonado el sector de población adulta a su capacidad de hacer y gestionar, el régimen intenta producir y desarrollar una «nueva cultura» entre la juventud a partir de las actividades físicas y deportivas, y así lo expresan reiteradamente las iniciativas legales que se refieren al tema y que reproducen machaconamente la misma justificación en su introducción.[5]

La obra definitoria de lo que se pretende desde los inicios del franquismo como política de educación física y deportes, es la Cartilla Escolar de Educación Física.[6] Esta obra, dedicada a los maestros, y sucesivamente plagiada en distintos momentos por los autores oficiales del régimen, tiene como objetivo ser, y de hecho lo consigue con gran calidad y profundidad técnica, una auténtica guía didáctica de la especialidad, desde las palabras de Franco en la promulgación de la Ley del Frente de Juventudes que se establecen como referencia básica:

…El Estado que guarda y restablece la efectividad de los derechos de la Iglesia y la familia en la educación, funda con esperanza su propia obra para la forja política y militar del hombre que ha de ser heredero de los sacrificios de nuestra generación. Cuantos medios tenga el Estado deben volcarse en la vigilancia, custodia y apoyo al Frente de Juventudes, verdadera obra predilecta del régimen. Digo que será empeño inútil y peligroso el de quienes pretendan entorpecerla.  ¡Arriba España! 

Está en la intención del régimen, al menos en el plano teórico, la cesión de parte de las obligaciones del estado en materia de educación a la iglesia, y a la familia, o lo que es lo mismo, la aceptación del discurso tradicional de la iglesia católica sobre  su derecho a la educación. Sin embargo, y como consecuencia de la indudable influencia de los regímenes alemán e italiano, y especialmente de la presión de los sectores falangistas del grupo Ridruejo, a los que ya hemos hecho referencia, en este momento, se reserva el Estado la formación política y militar del ciudadano, haciéndolo además con una metodología y objetivos propios, consecuentes con la ideología de la nueva forma de Estado. Es precisamente esta cuestión, de servidumbre a las ideas del partido único, la que distingue al régimen de Franco de la dictadura portuguesa, y de lo contenido al respecto en la Constitución de la República de Irlanda, donde se hacen concesiones plenas a la Iglesia sobre el derecho a la educación sin limitaciones ni contrapartidas.

La  voluntad de cambiar lo existente en este tipo de educación es indudable, se reconoce la existencia anterior de actividades lúdicas, rítmicas y en la naturaleza en la escuela primaria, sin embargo, considerando insuficiente lo anterior, se pretende una reorientación ideológica, y un relanzamiento de estas actividades.[7]

La intención es llevar a cabo una auténtica metodología de formación por la acción en la que habiéndose reservado la enseñanza de la educación física para el aparato político del régimen, se asigna al Frente de Juventudes la función y la responsabilidad docente, estableciéndose un plan completo que comienza por  la formación específica de los maestros en educación física, así como la función inspectora de esta materia en la enseñanza privada y pública, las cuales serán independientes y separadas del resto de las disciplinas académicas.

La razón, para la especial atención y control de estas enseñanzas, es la conciencia clara de su capacidad de convocatoria entre los sectores mas jóvenes de la población, su aparente inocuidad política, y la posibilidad de conseguir mediante el proceso de formación por la acción los objetivos de educación político-social del nuevo régimen.[8]

Un ideal vitalista y biologista de mejora de la salud, educación específica para cada sexo, observancia de la moral católica, ideal práctico de mejora de la condición física, y un ideal social y político, sin discusión posible, en el que se trata de afirmar lo que el régimen entiende como objetivos finales e irrenunciables del modelo del nuevo ciudadano, formado en el fondo y en la forma de acuerdo con los postulados políticos del régimen.[9]

Lo nacionalista y la exaltación de los valores autóctonos se lleva a la educación física, y aun a sabiendas de que no existe tradición científica o educativa propia, que pueda asumir el desarrollo de esta disciplina, se tratará de conseguir a toda costa la eliminación de cualquier copia o imitación extranjera. Basarse en las “puras esencias nacionales” es la idea central que se propone, el método consiste en partir desde los juegos populares para llegar a establecer un método nacional. Se es consciente de la escasa atención dedicada hasta ese momento a la educación del cuerpo, y se plantea, al menos a nivel teórico, conseguir para el cuerpo la misma atención que para el espíritu.

La enseñanza de la educación física es para el régimen una acción política, se recurre en el razonamiento a la complejidad de la disciplina, a los sacrificios y a la dureza que requiere el llevar acabo esta enseñanza, para justificar la necesidad de la especialización y del profesorado específico. Se habla de la necesidad de una concienciación política importante, en la idea del aparato político del régimen, no solo se rechaza el que esta enseñanza esté en manos privadas, sino que incluso se niega la posibilidad de que lo haga un organismo estatal exento de carga ideológica y política.[10]

El diseño iniciado en los primeros años, prácticamente durante la guerra civil, comienza a dar unos resultados objetivamente considerados como excelentes poco tiempo después, se mantiene, al menos sobre el papel, la intención política de los primeros días, veinte años después se resalta como principal logro del sistema la existencia de un clima general deportivo, se insiste en que los logros obtenidos a nivel de personas o de marcas no son lo importante, sino que lo es el deseo de llegar hasta el último rincón del país con la creación de hábitos deportivos que es lo que se considera como fundamental.

Se  tiene la idea de un desarrollo horizontal de la educación física, antes que la consecución de gaseosos éxitos olímpicos y se condena la profesionalización de los deportistas, al tiempo que se continúan lamentando las carencias para llevar a cabo la obra de extensión de la educación física como obra propia del régimen[11] .

Los responsables políticos no albergan duda alguna sobre los objetivos  de la educación física, de la consecución de valores morales, y de la implicación ideológica de los educadores en este proceso, y así lo manifestaba el propio Jesús López Cancio Delegado Nacional de Juventudes,[12] tampoco les cabe duda alguna sobre el desarrollo de las virtudes morales inherentes a la práctica de la actividad física, a mayor gloria de Dios, tal como lo sostenía el padre Llanos, que en esta época se encuentra entre los responsables de la formación religiosa de las juventudes del régimen.[13]

La educación física se percibe como un  instrumento a la medida de las necesidades para la realización política del régimen: posibilita una acción educativa en línea con los postulados que se entienden fundamentales, concita la presencia de grandes masas sobre las que incidir con una cara amable y desde el desenfado de lo intrascendente, aporta una idea educativa de disciplina, de esfuerzo colectivo, de modernidad, de progresismo, de participación social, desde un punto de vista nacional y nacionalista, de exaltación de virtudes raciales, de la «furia hispánica», y lo que es más importante, puede ser promovido desde unas instancias del poder en las que se asegura un total control ideológico de los profesores y dirigentes.[14]

REFERENCIAS BIBIOGRÁFICAS

[1] …Las normas prácticas, desde bien temprano, más que prejuzgar, establecen abiertamente no solo el rechazo de la coeducación sino, lo que es más, la clara definición de papeles a desarrollar en una posterior vida adulta por los niños y niñas sobre quienes ha de actuarse. Así en función de esos objetivos, perfectamente distintos y aun contrapuestos para cada sexo, se fueron ordenando los programas de formación»

                SAEZ MARIN, J: El Frente de Juventudes. Política de Juventud en la España de las Postguerra (1937-1960). Madrid. Siglo XXI de España Editores, sa. 1988

[2] La coeducación o emparejamiento escolar es un crimen ministerial contra las mujeres decentes. Es un capítulo de la acción judía contra las naciones libres. Un delito contra la salud del pueblo, que deben penar con su cabeza los traidores responsables. REDONDO, O.: Revista Libertad 28-12-1931

[3] Palabras de José Antonio Primo de Rivera en el discurso pronunciado en Don Benito (Badajoz) el 28 de Abril de 1.935 y reiteradas en una entrevista hecha por Luisa Trigo a propósito del voto femenino publicada en La Voz el 14-2-1.936. –

                PRIMO DE RIVERA, J.A. – Obras Completas. Recopilación de Agustín del Rio Cisneros, Madrid, Delegación Nacional de la Sección Femenina de FET y de las JONS, 1.966 Págs. 74, 76,538, 615 y 859.

[4] SAEZ MARIN, J.:Ob. cit.

[5] Como tarea primordial e ineludible de nuestro Movimiento hemos de considerar la de la formación política, física y premilitar en las generaciones que habrán de ser continuadoras del esfuerzo y sacrificio que España precisa para la total realización de su destino… Ley de 06-12-40: Instituyendo el Frente de Juventudes. BOE. nº 342 de 7-XII-1940.

                Decreto de 02-09-1.941: Creación de  la Academia Nacional de  Mandos “José Antonio”. Creación de la Academia Nacional de  Mandos “Isabel la Católica” BOE: 8-IX-1941.

[6] DELEGACION NACIONAL DEL FRENTE DE JUVENTUDES: Cartilla Escolar de Educación Física – Manual de Educación Física para 1945; Ediciones del Frente de Juventudes – Publicación num. 285 – Núm. 17; Madrid, 1944.

[7] …el estado marca  para la enseñanza en la Escuela Primaria: Un ideal político-nacional y pedagógico escolar (para formar al español) como el modelo de caballero del siglo XVI: católico, valeroso, desinteresado, cortés y profundamente humano. Una educación específica para cada sexo… DELEGACION NACIONAL DEL FRENTE DE JUVENTUDES: Cartilla Escolar de Educación Física – Manual de Educación Física para 1945.

[8] …para conseguir una pedagogía española y una escuela nacional en la que el servicio, la disciplina y la devoción sean la base de la formación Nacional-Sindicalista, que es la doctrina del nuevo Estado. DELEGACION NACIONAL DEL FRENTE DE JUVENTUDES,  Cartilla Escolar de Educación Física – Manual de Educación Física para 1945.

[9] …en cuanto a formarles con unos fines, para que llegue a ser buen productor o soldado……reconociendo la importancia que tiene el ejercicio físico educativo e indicar al sexo lo que a cada uno le es propio, con el sentido profundamente religioso de la  Falange.  DELEGACION NACIONAL DEL FRENTE DE JUVENTUDES. Cartilla Escolar de Educación Física – Manual de Educación Física para 1945.

[10]  Por esto, la educación física no debe estar en manos individuales, ni en un organismo estatal desorganizado. 

                El partido que reúne a los mejores, tiene que llegara a conseguir con la formación física de la juventud, el que se pueda disponer de generaciones vigorosas, con preparación militar, adaptación profesional y sentimientos morales y religiosos, tener una masa instruida a base de fortaleza, disciplina, preparación y voluntad, dispuesta a emprender toda clase de nuevas, prósperas y próximas empresas.

                ……………… Y al tener que señalar nuestras orientaciones sobre esta materia, decimos claramente que podemos darnos cuenta del importante papel que desempeña la Educación Física y de los enormes beneficios que esta reporta al individuo y a la colectividad, pero sobre estas ventajas, nosotros obtenemos una posición eminentemente práctica y sobre todo Nacionalsindicalista. La Educación Física es una parte de la educación integral y también para nosotros es un medio de formación falangista.  

                DELEGACION NACIONAL DEL FRENTE DE JUVENTUDES: Cartilla Escolar de Educación Física – Manual de Educación Física para 1945.

[11] EDITORIAL: Cuadernos de Orientación, Nº 9, Doncel, Madrid, 1961. Pág. 2

[12] …  En efecto, toda actividad deportiva exclusivamente preocupada de la belleza, el  vigor, la agilidad corporal, resulta socialmente indiferente sino se la conjuga con un elevado propósito de sanidad moral, suave pero tenazmente imbuida por quienes, sobre su calificación técnica, han de tener una permanente conciencia de su responsabilidad de educadores.

                Por su parte, la educación cívica será infructuosa si se limita a trasmitir un repertorio básico de ideas políticas y no se cuida de inculcar unos hábitos de convivencia y una voluntad de servicio, que no se alcanzan solo por persuasión dialéctica, sino con un entrenamiento para el cual el deporte constituye un medio insuperable.  … LOPEZ CANCIO, J. -«Santo y Seña”, Cuadernos de Orientación, Nº 9, Doncel, Madrid, 1961. Pág. 4

[13] … La carne del hombre, puesta a prueba en las competiciones, alcanza una  belleza y perfección como pocas escenas en la vida. Esta carne tan pesada y resistente, tan inerte y excitante, tan grosera e insoportable; esta carne del hombre, en el estadio, se sublima y redime en escala natural, sobre toda ponderación, sobre toda nostalgia. Algo así como si el Creador permitiese, por excepción bendita, el recuerdo palpable de una grandeza perdida.  …  LLANOS J.M.: Elogio de esta carne dolorosamente humana ( De «Cartas cristianas” en Arriba ), reproducido, Cuadernos de Orientación, Nº 9, Doncel, Madrid, 1961.

[14] N.A. Esta identificación de las actividades físicas y del deporte con la obra política del régimen y con su institución políticamente más significada, la Secretaría General del Movimiento, es lo que ocasionará durante la transición política uno de los más serios traumas, y uno de los más arriesgados saltos al vacío de la educación física y del deporte escolar, de los que todavía, el mundo educativo no se ha recuperado del todo.

 

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